La productividad de las cerdas ha cambiado drásticamente durante las últimas décadas. La selección genética continua condujo a una alta prolificidad y a la producción de una progenie muy magra.
Como consecuencia, las cerdas modernas producen camadas más grandes que antes y cada cría es más delgada y crece más rápido.
CERDAS EN GESTACIÓN
Durante la gestación, las cerdas experimentan cambios dramáticos con el crecimiento fetal y el crecimiento de la glándula mamaria.
Un estudio investigó el crecimiento de los fetos porcinos y determinó sus necesidades de nutrientes.
Este aumento dramático en el crecimiento durante la última etapa de la gestación incluye el crecimiento del corazón, el hígado, los intestinos y la placenta.
Fue interesante observar que el crecimiento no fue significativo hasta el día 80 de gestación (0,41 g de aumento de proteína/glándula/día) mientras que aumentó significativamente (24 veces) a 3,41 g de aumento de proteína/glándula/día después del día 80 de gestación. |
Teniendo en cuenta estos patrones de crecimiento, los requerimientos de proteínas deberían ser mayores en la gestación tardía en comparación con la gestación temprana.
Mantente al día con nuestros boletines
Reciba gratuitamente la revista en versión digital
REGISTRO
ACCEDA A
SU CUENTA
ACCEDER
¿Ha perdido la contraseña?