Icono del sitio porciNews, la revista global del porcino

Bioseguridad en granjas de hembras reproductoras

Escrito por: Lara Ruiz

Cuando nos hacemos responsables de una granja de cerdas reproductoras en la que existen 2 o 3 espacios tan diferentes (gestación, maternidad y en muchos casos destete) y en la que hay innumerables movimientos de animales cada día, debemos ser conscientes de los riesgos que ésto supone para la Bioseguridad.

Por eso debemos establecer unas normas y saber que cuanto más estrictos seamos en su cumplimiento más posibilidades tendremos de no sufrir variaciones en nuestra sanidad.

Pero esto pasa por una correcta mentalización de todos los trabajadores y responsables de la granja.

Los principales puntos puntos críticos a tener en cuenta en la Bioseguridad en granjas de cerdas reproductoras:

Lo prioritario es entrar las cerdas ordenadas por fecha y no mover lechones entre salas o como mínimo entre lotes. Importantísimo minimizar los traspasos de lechones, pero con la llegada de cerdas hiperprolíficas, esta premisa es difícil de cumplir.

En mi opinión hay dos sistemas indicados de nodrizaje para comprometer mínimamente la bioseguridad del lote:

Otro punto interesante a analizar en cuanto a bioseguridad es el procesado de camadas.

En el procesado de camadas, si no se es cuidadoso con los cambios de agujas entre ellas y con limpiezas y desinfecciones de artilugios de procesado, estarmos comprometiendo indudablemente nuestra bioseguridad.

Por eso para mí el uso de máquinas de procesado está muy indicado para un correcto funcionamiento en granja:

Tienen la ventaja de las pistolas sin agujas, además de poder cortar la cola y cauterizar.

Se puede realizar todo el procesado seguido sin necesidad de apoyar ni dejar lechones en ningún espacio, que luego puede ser punto contaminante para las siguientes camadas.

Si se cortan los dientes, mejor limarlos o ser muy meticulosos con el filo de las tijeras y desinfectar después de cada camada.

Aquí también lo prioritario es el llenado de las salas por lotes semanales ordenados.

Lo más importante es prohibir los traspasos entre salas y como siempre, cambiar de agujas lo máximo posible.

En cuanto al vaciado de la sala lo ideal es Todo Dentro-Todo Fuera pero si no fuera posible, los lechones pequeños se retrasarían como máximo una semana.

Importantísimo después del  vaciado de cada lote en cada zona de la granja realizar una limpieza exhaustiva con jabón y desinfectantes, revisada por encargados y visitadores antes de volver a introducir otro lote.

La experiencia no cabe duda que ayuda a minimizar muchos riesgos, pero hay que ser conscientes de que cada granja es distinta y lo que funciona en una explotación puede no ser suficiente en otra.

Salir de la versión móvil