Icono del sitio porciNews, la revista global del porcino

CERDAS HIPERPROLÍFICAS, ¿EXISTE EL MANEJO IDEAL DURANTE LA LACTACIÓN?

Escrito por: Cesar Augusto Pospissil Garbossa - Laboratório de Pesquisa em Suínos da FMVZ/USP

En la producción porcina, la selección genética a favor de caracteres de importancia económica, como el número de lechones nacidos, ha dado lugar a una serie de desafíos sanitarios y de bienestar, aumentando las tasas de mortalidad consideradas normales, como también, cambios significativos en los manejos de rutina, especialmente durante la lactación.

Uno de los principales retos es la relación entre el tamaño de la camada y la mortalidad de los lechones.

Como demuestra el benchmarking de Agriness (2022), en Brasil, en el año 2021, una granja alcanzó el récord de 41,15 destetes/hembra/año.
Aunque se ha tenido éxito en la reducción del impacto negativo de las grandes camadas a través de estrategias genéticas, nutricionales y de manejo, sigue siendo un variable que plantea un importante desafío para la producción porcina mundial.

La relación entre mortalidad y las camadas numerosas está asociada a varios factores, incluyendo:

  1. Aumento de la duración del parto
  2. Mortinatos y lechones que sufren hipoxia
  3. Competencia por las tetas y, en consecuencia
  4. Reducción de la ingesta de calostro

Este escenario se ve agravado por la amplia heterogeneidad de peso dentro de las camadas. En las grandes camadas se produce un aumento del 30 al 40% de la aumento del número de animales con retraso de crecimiento intrauterino (RCIU).

Además de los efectos negativos sobre los lechones, la hiperprolificidad puede afectar a la salud de las cerdas, reduciendo su longevidad debido al desafío metabólico al que están expuestas, aumentando su susceptibilidad al estrés térmico y presentando una mayor pérdida de condición corporal.

En este sentido, si los desafíos salud y el bienestar de las cerdas no son tenidos en cuenta, habrá consecuencias negativas sobre el rendimiento y la supervivencia de los lechones, perdiendo por ende, los beneficios logrados por aumento del número de lechones nacidos.

AMBIENTE
PARA SEGUIR LEYENDO REGISTRESE ES TOTALMENTE GRATUITO Acceso a los artículos en PDF
Mantente al día con nuestros boletines
Reciba gratuitamente la revista en versión digital
REGISTRO
ACCEDA A
SU CUENTA
ACCEDER ¿Ha perdido la contraseña?

Salir de la versión móvil