El uso de óxido de zinc terapéutico para la prevención de diarreas post destete ha sido una herramienta cuyo uso se extendió con éxito en el sector porcino durante las últimas décadas.
Los factores de éxito en este nuevo escenario comprenden un amplio y diverso abanico de factores: nutrición, edad al destete, bioseguridad, calidad del agua, ambiente, y un largo etc.
En esta serie de cuatro newsletters vamos a desgranar las principales claves nutricionales para diseñar dietas de lechones sin oxido de zinc terapéutico. En esta segunda entrega vamos a poner el foco en el soporte al sistema inmune (ver primera entrega aquí).
¿QUÉ PODEMOS APORTAR DESDE LA NUTRICIÓN?
El destete es una etapa delicada para la salud intestinal de los lechones, ya que se enfrentan a cambios nutricionales, sociales y ambientales en un momento en el que tanto el sistema digestivo como el inmunitario no están completamente desarrollados.
Desde la nutrición se busca dar apoyo al sistema inmunitario aportando los nutrientes esenciales para asegurar una respuesta rápida, así como aportar elementos que ayuden a modular la respuesta inflamatoria y sus consecuencias.
1. APORTE DE NUTRIENTES ESENCIALES
Las necesidades nutricionales de un lechón alrededor del destete son distintas a lo que podemos esperar de un lechón en fase de crecimiento. Por ejemplo, el perfil ideal de aminoácidos de un lechón en crecimiento es aquel que cubre mayoritariamente las necesidades relacionadas con la síntesis de tejido muscular.
En Cargill®, durante los últimos años, se ha desarrollado el programa de deszincalización Neopigg Shield®, en el que se define un perfil de aminoácidos específico para lechones alrededor del destete.
En este perfil de aminoácidos juegan un papel especialmente relevante algunos aminoácidos esenciales cómo el Triptófano o la Treonina y también aminoácidos funcionales como el Glutámico, o la Leucina.
2. MODERAR LA RESPUESTA INFLAMATORIA
El sistema inmune del lechón en el momento del destete está sometido a un alto nivel de estrés. Como defensa, el lechón activa los mecanismos de inflamación.
La Figura 1 muestra cómo la concentración de radicales libres en aquellos lechones que ya han sido destetados es mucho más alta que en aquellos lechones control que todavía no han sido destetados.
Con el objetivo de reducir la respuesta inflamatoria, la suplementación de ácidos grasos ricos en omega-3 ayuda a reducir la respuesta inflamatoria y por tanto reducir sus efectos negativos sobre la integridad intestinal (Ruirong et al. 2015).
3. REDUCIR LOS EFECTOS NEGATIVOS DE LA INFLAMACIÓN
Puesto que la respuesta inflamatoria es un proceso natural que ocurre alrededor del destete, otra de las estrategias nutricionales que podemos utilizar para paliar sus efectos negativos es la suplementación de elementos antioxidantes que eviten el daño causado por los radicales libres generados.
La Figura 2 muestra cómo el daño ocasionado en la morfología intestinal es superior en lechones destetados sin la suplementación de antioxidantes.
La suplementación de antioxidantes en dietas alrededor del destete también tiene un impacto positivo en la secreción de inmunoglobulinas generando una respuesta inmunitaria más rápida (Hao et al. 2015).
Neopigg Shield® es un programa de deszincalización con más de 150 pruebas de campo y de investigación que demuestran su eficacia.
Hoy hemos desgranado las claves fundamentales para generar una respuesta inmunitaria rápida alrededor del destete y, a la vez, moderar los niveles de inflamación del sistema gastrointestinal.
En la próxima entrega de esta serie profundizaremos en la importancia de soportar las mucinas intestinales como primera barrera física de defensa frente a patógenos.
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