El sector porcino está apostando por la sostenibilidad, por la necesidad de reducir la emisión de gases contaminantes, por petición de la política europea, antes de 2050. La política busca alcanzar el impacto medioambiental neutro. Según la Interprofesional del Porcino de Capa Blanca (INTERPORC), transmutación pasa por: los avances en la reducción de emisiones y el uso de energías renovables.
El Día Mundial por la Reducción de las Emisiones de CO2, celebrado el día 28, tuvo las declaraciones del director de INTERPORC, Alberto Herranz, declarando que: “toda la cadena porcina está totalmente comprometida con la producción sostenible y la reducción constante de emisiones, y los datos oficiales del Ministerio de Transición Ecológica nos avalan”.
El director trataba de concienciar de que “el CO2 supone las tres cuartas partes de los gases de efecto invernadero”, no obstante, según los datos del Inventario de Emisiones (GEI) del Ministerio de Transición Ecológica, el sector porcino solo genera el 2,64% del total, lejos de alcanzar las cifras del transporte (27%), la industria (19%), o la electricidad (17%). Por este motivo, la sostenibilidad es uno de los objetivos en los próximos años.
Sin embargo, cada vez se hace más uso de las energías térmicas, solares y fotovoltaicas, que aportan sostenibilidad y puede favorecer a dejar menos impacto ambiental, e incluso, distribuir los excedentes. Igualmente, el director de la organización, afirma que el metano se usa en un ciclo biogénico que tarda 12 en transformarse en agua y CO2, y que el CO2 es convertido en la fotosíntesis de las plantas. Por este motivo, es Herranz apuesta por una iniciativa de impacto climático neutro, gracias a los requerimientos de 2050.