Cuando se habla del agua de bebida en las explotaciones porcinas, un aspecto fundamental es la bioseguridad, ya que existen muchos factores que hacen que estas explotaciones estén sometidas a un alto riesgo en relación a la entrada y difusión de enfermedades.
Un correcto cumplimiento de las medidas de bioseguridad permitirá mantener una explotación en buenas condiciones sanitarias, posibilitando una producción mayor y de mejor calidad (Mapama.gob.es, 2017).
Todos los animales deben contar con un suministro de agua limpia, suficiente y con un acceso fácil y directo
Diseño & construcción de la instalación
Partir de un diseño adecuado de la instalación facilitará
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Con mayor frecuencia de la que nos gustaría, encontramos explotaciones nuevas sin depósito intermedio para realizar el tratamiento, con depósitos mal situados o con unas dimensiones inadecuadas.
En el momento del diseño, colocar un depósito intermedio es sencillo. Es importante tenerlo previsto desde el inicio del diseño de la instalación, ya que colocarlo a posteriori podría resultar difícil.
Es importante conocer previamente la calidad del agua que van a beber los animales. Puede parecer algo muy obvio, pero en más de una ocasión nos hemos encontrado con unas instalaciones nuevas y bien diseñadas, pero con un agua con características fisicoquímicas no aptas para consumo y que se deberían tratar.
Tratamiento del agua
En el mercado existen multitud de productos y equipos para realizar el tratamiento de potabilización del agua, siendo necesario escoger la opción más adecuada para cada caso concreto. No existe una solución universal ni un producto que funcione bien en todas las explotaciones.
Es necesario tener en cuenta que se trata de productos químicos que pueden resultar corrosivos o peligrosos y deben manejarse adecuadamente.
El estado de mantenimiento y limpieza de balsas, depósitos, conducciones de agua y bebederos condiciona la calidad del agua.
Es importante realizar un correcto tratamiento de potabilización del agua con los equipos y productos adecuados, pero no podemos olvidar operaciones fundamentales como:
- Limpieza y desinfección de las tuberías al final de cada crianza
- Limpieza del equipo y línea de medicación
- Limpieza de bebederos
- Limpieza de balsas y/o depósitos
Para poder realizar el control de la calidad microbiológica y fisicoquímica del agua, es necesario realizar, como mínimo, una analítica anual en el caso de que el agua no provenga de la red pública, donde determinaremos:
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Parámetros fisicoquímicos pH, dureza y conductividad Parámetros microbiológicos Coliformes totales, E.coli, enterococos y Clostridium perfringens |
Conviene disponer de un programa de control del agua en la explotación en la que conste:
- La persona responsable de realizar los controles
- Esquema de la instalación, puntos de control, equipos y productos empleados
- Registro de las actuaciones, resultados analíticos y medidas correctoras
- Protocolos de actuación y fichas técnicas de los productos empleados
No debemos considerar el suministro y la calidad de agua en la explotación como algo secundario, tanto en el momento del diseño de nuevas instalaciones como en instalaciones más antiguas. Es importante valorar el asesoramiento externo por parte de empresas dedicadas al tratamiento de agua en ganadería antes de tomar decisiones.
La bibliografía será facilitada bajo petición
