Icono del sitio porciNews, la revista global del porcino

Memoria porciFORUM 2020 – Antonio Vela

Veterinario de vocación, amante de los animales, de la ganadería y del mundo rural.me licencié en Zaragoza en 1998, desde entonces toda mi carrera ha estado vinculada en el mundo porcino. Desde 2014 veterinario y Cofundador en ThinkinPig, empresa que ofrece servicios veterinarios a empresas del sector porcino a nivel nacional e internacional. Profesor asociado del departamento de Producción Animal y Ciencia de los Alimentos. Facultad de Veterinaria de Zaragoza. Residente y actualmente candidato a examen para ser diplomado en el ECPHM. Master en iniciación a investigación en ciencias Veterinarias. Titulo de Experto Universitario en estadística aplicada a ciencias de la Salud por la UNED. Actualmente realizando el Master Universitario en Gestión Integral de Ensayos Clínicos Veterinarios. Especializado en el campo de la reproducción, especialmente en ecografía reproductiva donde tengo varios trabajos, publicaciones y participado en congresos y jornadas Técnicas a nivel nacional e internacional. Miembro de la junta directiva del Excmo. Colegio de Veterinarios de Zaragoza. Durante 8 años, fui miembro de la junta directiva de la Asociación de Veterinarios de Porcino de Aragón y de la Asociación Nacional de Veterinarios de Porcino, desde donde ha participado en la organización de distintos congresos y jornadas técnicas.

Manejo reproductivo en la producción porcina del futuro

La reproducción en los últimos años ha sufrido cambios orientados a la mejora de la eficiencia reproductiva. Los centros de inseminación son cada vez más sofisticados y automatizados, y se enfrentan a dos nuevos desafíos: producción libre de PRRS y reducir el número de espermatozoides por dosis seminal.

Es importante la gestión de la reducción del uso de antibióticos, así como la aplicación de nuevas estrategias, como el uso de semen congelado o semen refrigerado a bajas temperaturas. También es importante ser capaces de utilizar los verracos genéticamente superiores, según su prolificidad y fertilidad.

Las estrategias deben ir enfocadas a una inseminación de precisión. La ecografía reproductiva nos va a permitir establecer protocolos de inseminación precisos y eficientes, pero también determinar y caracterizar la pubertad en las cerdas de reemplazo, lo que se traducirá en un aumento significativo en las tasas de partos y en el número de nacidos.

La inseminación intrauterina es la técnica de inseminación más utilizada en cerdas adultas; otras técnicas como la transferencia embrionaria o el sexaje de espermatozoides siguen teniendo limitaciones a nivel de campo, aunque siguen considerándose técnicas con un gran valor a futuro.

Durante los últimos años, al igual que en otros aspectos de la producción porcina, la reproducción ha sufrido un notable cambio dirigido mayoritariamente a mejorar la eficiencia reproductiva.

Los centros de inseminación, cada vez con sistemas más sofisticados y automatizados, ofrecen resultados mucho más eficientes en relación al procesado del semen, y son acordes con las exigencias cada vez mayores del mercado; pero a su vez no están exentos de nuevos desafíos, empezando por los controles sanitarios que certifiquen una producción libre de virus PRRS.

Por otro lado, está el desafío de reducir el número de espermatozoides por dosis. Es un hecho ya probado que el beneficio de los centros de inseminación pasa por una reducción del número de espermatozoides por dosis.

En términos generales, esta concentración en una dosis convencional está sobre los 2 millones de espermatozoides, pero se observa que, en algunos países como Holanda, el número de espermatozoides se ha reducido hasta situarse entre 1 millón y 1 millón y medio de espermatozoides en una dosis convencional de 80ml.

Otro aspecto a considerar es el hecho de sumarse al compromiso general del sector de reducir el uso de antibióticos, en este caso en su uso en los diluyentes, y especialmente importante cuando hablamos de antibióticos de uso en medicina humana.

Y desde este punto de vista, se busca la eficacia en nuevas estrategias como son el uso de semen congelado o semen refrigerado a bajas temperaturas.

Por otro lado, existe un mercado cada vez más exigente en relación a la calidad y a la homogeneidad del producto final, que a la postre se traduce en ser capaces de utilizar los verracos genéticamente superiores, no solo en términos de fertilidad y prolificidad, sino también en términos de capacidad de mejora de los índices técnicos en el cebadero, como la GMD, el índice de conversión, el rendimiento de canal o la calidad de la misma.

Tanto desde la necesidad de los centros de inseminación, como desde la demanda de los propios productores a nivel de granja, deberemos trabajar con estrategias enfocadas a la inseminación de precisión.

En este caso, es útil la utilización de la ecografía reproductiva, no solo como herramienta diagnóstica, sino como una herramienta de búsqueda de la eficiencia a través de los análisis de dinámica folicular y su relación con el manejo en la detección del celo.

Con esta técnica desaparecen las cerditas cubiertas en el primer ciclo, o en primeros ciclos después de la inducción hormonal del celo, lo que contribuye a un aumento significativo en la tasa de partos y en el número de nacidos.

De la misma manera, podemos controlar si ha habido o no actividad ovárica previa a un tratamiento con progestágenos, por lo que aumentamos el éxito de dichos tratamientos.

Además, estas técnicas de detección de la pubertad se pueden aplicar por el personal de la explotación debidamente formado, con ecógrafos convencionales, económicamente amortizables para cualquier explotación actual.

Además del uso de la ecografía para los estudios de dinámica folicular y programas de inseminación de precisión, su aplicación en la determinación y caracterización de la pubertad en las cerdas de reemplazo demuestra ser una técnica que contribuye a un mejor conocimiento del estado reproductivo de las cerdas de reposición.

La ecografía reproductiva nos va a permitir establecer protocolos de inseminación precisos y eficientes, que además contribuyen a una formación completa del personal encargado de realizar dichos procesos, llegando a visualizar y entender qué esta ocurriendo realmente en el interior de la cerda en el momento de la inseminación.

En cuanto a la propia técnica de inseminación, la inseminación intrauterina es la técnica de inseminación más utilizada en cerdas adultas, si bien estudios recientes han demostrado resultados iguales en cerdas jóvenes cuando se compara con la inseminación artificial convencional.

Otras técnicas reproductivas como la transferencia embrionaria, el sexaje de espermatozoides, la inseminación a partir de semen congelado, la inseminación intrauterina profunda o la inseminación a tiempo fijo siguen teniendo limitaciones a nivel de campo, lo que no impide que se siga trabajando en ellas y sigan siendo consideradas técnicas con un gran valor a futuro.

Salir de la versión móvil