Un sistema intestinal sano es vital para una correcta digestión del pienso, un buen crecimiento productivo y la prevención de desórdenes digestivos. Por lo tanto, la clave para mantener lechones sanos es cuidar de la salud asociada al tracto gastrointestinal.
El intestino es un ecosistema muy dinámico e inteligente por sí mismo, colonizado por una comunidad completa de microrganismos muy diversa.
Un cambio hacia el predominio de bacterias patógenas puede tener un impacto negativo directo sobre la salud y el crecimiento de los lechones.
EL PAPEL DE APOYO DE LOS PROBIÓTICOS EN LA SALUD INTESTINAL DEL LECHÓN
Actualmente, las estrategias basadas en probióticos están completamente focalizadas en:
Varios conceptos han ido tomando especial interés últimamente, especialmente bajo la luz de las próximas prohibiciones del uso farmacológico de óxido de zinc en lechones destetados en la Unión Europea.
Las bacterias ácido-lácticas (LAB, por sus siglas en inglés) tienen, en nutrición animal, una larga historia de éxitos por su eficacia en la estrategia de exclusión competitiva.
Una producción eficiente de ácido láctico en el intestino reduce el pH y dificulta el desarrollo de bacterias patógenas como E. coli y Salmonella spp. Por otro lado, las bacterias beneficiosas se aprovechan de la producción de ácido láctico y lo utilizan como sustrato para su correcto desarrollo.
Las cepas probióticas esporuladas también son de sobra conocidas por presentar efectos beneficiosos para la salud intestinal, principalmente por su capacidad de producir enzimas, inhibir directamente el crecimiento de ciertos patógenos a través de compuestos antimicrobianos, y conseguir un entorno favorable para el resto de las bacterias beneficiosas existentes en el medio intestinal.
A diferencia de las LAB, sólo las cepas probióticas de Bacillus esporuladas presentan una resistencia natural a los tratamientos térmicos, asegurando su recuperación en los piensos granulados.
UNA NUEVA CEPA REGISTRADA EN LA UNIÓN EUROPEA
Uno de los objetivos continuos de búsqueda y desarrollo es descifrar la eficacia y el modo de acción de las cepas de probióticos aprobadas.
Dichas observaciones han dado lugar a la necesidad de desarrollar una nueva cepa de probiótico que presente estas características intrínsecas en su modo de acción.
En la Figura 1 se muestran los resultados de un estudio in vitro realizado para determinar la eficacia de distintas cepas de LAB en su capacidad para producir ácido láctico.
ALTA RECUPERACIÓN TRAS PROCESOS DE GRANULACIÓN
Otro aspecto importante a tener en cuenta en relación a los probióticos que van a ser añadidos en el pienso es su resistencia a las altas temperaturas a las que son sometidos durante los procesos de granulación del pienso.
Para determinar la estabilidad de Bacillus coagulans DSM 32016 a las temperaturas elevadas, se llevó a cabo una prueba de granulación a 80°C y 100°C para medir la ratio de recuperación de esta cepa.
En dicho ensayo, B. coagullans DSM 32016 demostró exitosamente unas ratios de recuperación fiables en las condiciones normales de granulación (Figura 2), convirtiéndolo así en un probiótico de elección para un amplio rango de aplicaciones.
EFICACIA EN LA INHIBICIÓN DE E. COLI PATÓGENA
En un estudio desarrollado en la universidad de Alemania, se llevó a cabo el crecimiento específico de dos cepas distintas de E. coli potencialmente dañinas, incubadas junto con un cultivo sobrenadante de B. coagulans DSM 32016.
EFECTOS POSITIVOS SOBRE LOS RESULTADOS ZOOTÉCNICOS
Varios estudios demuestran que la administración de B. coagulans DSM 32016 (a la dosis de registro en la Unión Europea de 1×109 UFC/ kg pienso) dio como resultado una mejora general en la salud y resultados productivos de los animales testados.
Por ejemplo, se demostró su efecto positivo sobre el rendimiento de los lechones destetados en un estudio realizado en el Instituto de Nutrición Animal de la Universidad de Freie, Berlín (Alemania).
Los desequilibrios de la microbiota intestinal pueden causar multitud de problemas, especialmente notables, en lechones destetados. Por ello, es necesario actuar estratégicamente buscando la supresión de bacterias patógenas y la promoción de bacterias beneficiosas al mismo tiempo.
Bacillus coagulans DSM 32016, registrado bajo la marca TechnoSpore®, es un nuevo y potente probiótico que puede actuar eficazmente gracias a sus diferentes modos de acción, generando un efecto positivo en el entorno intestinal de los lechones y, finalmente, ayudando a controlar y prevenir trastornos asociados al intestino, reduciendo así las pérdidas productivas en los lechones.