Nacido en Vigo (Pontevedra) en 1968. Licenciado en Veterinaria por la Universidad de Murcia en 1993, Doctor en Veterinaria y Premio Extraordinario de Doctorado por la Universidad de Murcia en 2002. Diplomado por el European College of Porcine Health and Management desde 2006. Ha trabajado en la industria porcinocultora, en exclusividad, durante más de 12 años en CEFU,S.A., empresa del grupo ElPozo alimentación. Actualmente es Profesor Titular de Universidad del Departamento de Producción Animal de la Universidad de Murcia, impartiendo docencia en el grado de Veterinaria. Colabora con diversos másteres en la Universidad de Murcia (Biotecnología de la Reproducción de Mamíferos y Crecimiento azul). Además, actualmente es director de la Granja Docente Veterinaria. Pertenece a los grupos de investigación “Cría y Salud Animal” desde 1997, “Nuevas alternativas al trasplante, tolerancia química y experimental. Donación de órganos” desde el año 2006 y al grupo Cirugía digestiva, endocrina y trasplante de órganos abdominales (GI/IMIB/C003/2011)del Instituto Murciano de Investigación Biosanitaria-Virgen de la Arrixaca desde 2014. Es coautor de más de 140 publicaciones internacionales y más de 80 publicaciones en revistas de divulgación, así como de 30 capítulos de libros y libros completos. Su investigación está centrada por un lado en la patología, genética y producción del ganado porcino y por otro en el xenotrasplante y la actitud hacia la donación.
- Conocemos como Complejo Entérico Porcino (CEP) a la enfermedad que deriva de la interacción entre patógenos de distinta naturaleza como virus, bacterias, parásitos e incluso hongos. La sintomatología y gravedad dependerá de la interacción entre los distintos factores implicados: los patógenos, el hospedador, la alimentación, la edad y el ambiente.
- La mayoría de los patógenos bacterianos y todos los víricos tienen que utilizar un receptor molecular presente en la superficie de los enterocitos y que hace posible su proliferación o internalización.
- Una de las interacciones más importantes es la que hay entre patógenos y dieta. No olvidemos que la dieta aporta nutrientes, tanto al cerdo como a su microbiota, siendo esencial que exista un equilibrio entre la microbiota sacarolítica o celulítica y la microbiota proteolítica.
- La higiene es un factor crítico, ya que la microbiota procede en gran medida del ambiente, por lo que la presencia de patógenos en las cuadras será clave para la aparición de enfermedades asociadas al CEP.