En el mundo actual la industria porcina requiere de una mayor eficiencia en los parámetros de producción. Los problemas reproductivos ocupan un lugar importante ya que influyen directamente en el número de lechones producidos por cerda al año. micotoxinas
Los factores de riesgo en problemas reproductivos en cerdos son numerosos y están correlacionados entre sí, se pueden clasificar en infecciosos y no infecciosos.
Existen varios agentes que causan daños al desempeño reproductivo, pero las intoxicaciones con micotoxinas (Micotoxicosis reproductiva) representan un gran desafío para el veterinario de granja.
El cuadro clínico se complica frecuentemente con otras enfermedades oportunistas, las micotoxinas, al ser inmunosupresoras, hacen al animal más susceptible a infecciones.
Por lo tanto, el diagnóstico suele ser más presuntivo, basado en:
- las características de la intoxicación,
- en la experiencia y
- en descartar otro tipo de enfermedad.
Mas de una micotoxina está involucrada, la presentación suele ser de tipo crónico, no es contagiosa y cuando se detecta el problema el alimento causante ya no existe.
En cerdas cualquier región del tracto genital puede verse afectada, útero y ovarios son los más sensibles. Las lesiones suelen estar enmascaradas por enfermedades infecciosas de importancia actual en los países. Sin embargo, su análisis plantea algunos retos para los laboratorios ya que su detección es una tarea difícil, y, por lo tanto, las micotoxinas a veces pasan desapercibidas.
Es importante considerar que la contaminación por micotoxinas es un proceso aditivo, puede iniciar en el campo de cultivo e incrementarse durante la cosecha, almacenamiento o en comederos.
Es muy común encontrar más de una micotoxina involucrada, los animales en diferentes etapas de producción pueden estar ingiriendo micotoxinas en pequeñas cantidades, no todos los animales son afectados por igual.
El muestreo para detección de micotoxinas que afectan tracto reproductor representa la mayor fuente de error en los resultados, debido a la distribución irregular de micotoxinas en granos y alimentos, los errores en la toma de muestras, las técnicas de laboratorio utilizadas para el análisis y la presencia de micotoxinas conjugadas o enmascaradas. Resultados falsos negativos, podrían relacionarse con muestreos inadecuados y/o una mala preparación de la muestra.
Las muestras deben ser representativas del lote y de un tamaño suficiente para compensar la distribución desigual del contaminante, así como los niveles ultra bajos (partes por billón) que deben detectarse.
Los métodos de recolección varían según el lugar donde se colecte: Cosechadora en el campo, camión de granos, un contenedor de envío, comederos, contenedores de almacenamiento, en el elevador o punto de venta.
Técnicas de laboratorio
Los resultados pueden variar según el tipo de prueba. Algunas pruebas son más específicas que otras con capacidad de detectar niveles más bajos de micotoxinas (mayor sensibilidad).
Por ejemplo, la HPLC (cromatografía líquida de alta precisión) tiene una sensibilidad mayor que la ELISA (inmunoensayo ligado a enzimas), es decir, es capaz de detectar niveles más bajos de micotoxinas en la muestra, pero es más costosa y lenta y no permite multidetección.
En la actualidad se cuentan con biomarcadores específicos para Aflatoxina M1 en leche y esfingolípidos en sangre.
Finalmente, se debe recordar que: Las micotoxinas pueden estar presentes a pesar de los resultados analíticos negativos, las micotoxinas no se distribuyen homogéneamente en el alimento, pueden pasar desapercibidas.
CONTROL Y TRATAMIENTO
Lo ideal sería que se siguieran al cien por ciento las buenas prácticas de manufactura (GMP) en las fábricas de alimentos, así como el buen manejo de los granos por parte de los agricultores en los campos de cultivo (siembra, cosecha, desgrane, almacenaje, etc.) y en la granja (contenedores, comederos, etc.).
Desafortunadamente no es así, por lo que se requiere la aplicación de algunos procesos para control y eliminación de las micotoxinas. Algunos de los métodos son:
- Limpieza de grano y buen almacenamiento,
- Utilización de adsorbentes: Arcillas (inorgánicas); Ácidos húmicos (orgánicos); Levaduras (orgánicas) y otras que causan desactivación: Enzimas, Bacterias, Levaduras, Metabisulfito de sodio
El uso de adsorbentes añadidos a la dieta se ha convertido en la alternativa más viable, impiden que la micotoxina sea absorbida por el animal y así evitan su efecto tóxico.
La selección del adsorbente indicado, representa un desafío para técnicos y productores, en este caso deberá ser uno capaz de proteger al tracto reproductor en hembras y machos.
CONCLUSIONES micotoxinas
Cualquier dieta puede contener micotoxinas. El diagnóstico es difícil ya que el sistema inmune es el primero en ser afectado. El uso de secuestrantes es la solución más práctica. Un buen secuestrante se demuestra con datos in vivo con protección en órgano susceptibles.
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