En este artículo, se examinarán las dificultades actuales en estos aspectos críticos, aportando soluciones a la absorción de nutrientes, la integridad de la barrera intestinal y el equilibrio inflamatorio.
El sector porcino en España ha enfrentado una serie de desafíos en los últimos años que han generado preocupación entre los productores y la industria.
Uno de los más significativos ha sido el aumento de los costes de las materias primas, como los cereales, que a su vez no ha venido acompañado por una mejora suficiente del precio de comercialización. La demanda por parte del consumidor tampoco ha sido la esperada, lo que no ha ayudado al alza de los precios en lonja.
Uno de los índices económicos más importantes es el coste kilo carne repuesto, que se define como el valor de producir un kilo de carne, englobando los costes directos e indirectos de la granja.
Ligado íntimamente estaría el índice de conversión, uno de los parámetros productivos clave a controlar especialmente durante la fase de cebo. |
Sin embargo, hablar de reducir el índice de conversión en cebo no es tema sencillo, debido a los múltiples condicionantes que pueden afectar a lo largo de los meses que dura el ciclo de cría.
Sin embargo, en ocasiones la integridad digestiva del cerdo no está preparada para asumir todo el potencial nutritivo de los ingredientes de la dieta, disminuyendo la eficiencia productiva del animal.
Un artículo publicado recientemente por Kogut y colaboradores, define la “salud intestinal” como:
“Concepto que implica la interacción entre el microbioma, la barrera intestinal y los nutrientes presentes en el alimento, que previenen la aparición de enfermedades y permiten la digestión y absorción adecuada de los nutrientes que serán utilizados por el animal para crecer y funcionar a su capacidad genética”.
Por lo tanto, no solo debemos prestar atención a la calidad de las dietas, sino también a la integridad intestinal del animal.
La última novedad presentada por Andersen con este objetivo es Bittmax, un pienso complementario en base a una concentración estandarizada de polifenoles naturales que busca potenciar la integridad intestinal para optimizar el crecimiento durante la fase de cebo y reducir los costes de producción.
Estos polifenoles poseen mecanismos multifactoriales en el intestino mediante los cuáles permiten incrementar la salud digestiva.
1. A nivel local, mejorando la función de barrera intestinal, debido a que aumentan la expresión de proteínas de las uniones estrechas, como la claudina o la ocludina, básicas para mantener la permeabilidad intestinal intacta y evitar el paso directo de antígenos a sangre, entre otras funciones clave.
Si tenemos en cuenta que la mayoría de las células del sistema inmune se encuentran en el intestino, una barrera intestinal íntegra permitirá una absorción de nutrientes óptima.
Para este objetivo, la microbiota también juega un papel esencial, pues la disbiosis intestinal modificará las poblaciones bacterianas beneficiosas, como los lactobacillus y las bifidobacterias.
2. A nivel sistémico, el nivel de inflamación intestinal es otro de los parámetros más importantes a controlar para una óptima salud digestiva. En condiciones fisiológicas normales, la inflamación es una respuesta protectora de los tejidos frente a estímulos nocivos (como son una lesión celular, irritación o invasión de patógenos) o para eliminar células dañadas y necróticas, siempre que ocurran en un corto período.
En definitiva, Bittmax se presenta como una solución nutricional para optimizar la integridad intestinal permitiendo optimizar los costes de producción, preparando el epitelio intestinal a lo largo del cebo de manera continua, donde el animal puede expresar todo su potencial genético de crecimiento sin dejar de lado otros factores indispensables como son también la sanidad, las instalaciones y el manejo. |
Alejandro Casanova – Product Manager Andersen SA y Prof. Asociado Dpto. Patología Animal, Universidad de Zaragoza
Camilo Caro – Marketing Manager Andersen SA
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