Los productores de porcino se enfrentan a una gran variedad de patologías. Dado que un alto porcentaje de la ganadería nacional es intensiva, las unidades de cría se enfrentan a grandes retos, por lo que es esencial desarrollar soluciones específicas para la prevención y el control de enfermedades en cada explotación.
Es importante una sólida estrategia de vacunación para proteger a las madres, lechones y cerdos en crecimiento de los principales grupos de enfermedades porcinas.
La vacunación por lotes también ofrece la llamada “inmunidad de rebaño”, lo que permite reducir la patogenicidad general de la enfermedad.
Ello conduce a una mayor duración de la inmunidad y a una menor dependencia de los antibióticos, cuestión fundamental y factor indispensable para una ética y sostenible producción porcina.
El informe de la Agencia Española del Medicamento indica que España, en el 2014, era uno de los países con mayor consumo de antibióticos, además de ser uno de los países con más resistencia antimicrobiana en su cabaña porcina.
Tras el Plan Nacional frente a la Resistencia a los Antibióticos (PRAN), antibióticos como la colistina han reducido su uso en la actualidad hasta un 100% y otros antibióticos, como la neomicina, han reducido su uso hasta en un 50%.
Otro reto para el sector porcino en 2022 es la eliminación del óxido de zinc como tratamiento de la diarrea postdestete, de acuerdo con la normativa de la UE.
Los cerdos tras el destete son susceptibles de padecerla y la optimización de la salud intestinal, la buena bioseguridad y la gestión del calostro deben ser las principales medidas preventivas (Fuente: AHDB).
VACUNACIÓN
La vacunación de las cerdas gestantes ofrece protección a los lechones aún no nacidos o a los recién nacidos a través del calostro.
Por ejemplo, la vacunación de las cerdas o cerdas jóvenes gestantes contra el Parvovirus Porcino (PPV), que puede causar problemas reproductivos, incluyendo la muerte de los lechones antes de nacer, ha sido una piedra angular para controlar el PPV y ha demostrado ser muy eficaz (Fuente: NOAH).
La vacunación, una vez más, ha demostrado ser clave en el control de esta enfermedad, que se transmite por contacto o vía oral (Fuente: NADIS). Las vacunas contra el Mal Rojo no deben administrarse antes de las seis semanas de edad. Las investigaciones sugieren que los anticuerpos maternos que se transfieren al cerdo a través del calostro y la leche pueden afectar a la vacuna si se administra demasiado pronto (Fuente: NADIS).
Los problemas inmunológicos en porcino pueden aumentar la complejidad de los cuadros observados en las explotaciones al predisponer a infecciones mixtas cuando el animal tiene comprometido su sistema inmunitario.
Un ejemplo es el Síndrome Reproductivo y Respiratorio Porcino (PRRS), que se ha convertido en un problema para muchas piaras en los últimos años, afectando a cerdos de todas las edades. En los lechones jóvenes provoca diarreas y debilidad, lo que conduce a altas tasas de mortalidad (Fuente: NOAH).
Muchos productores prefieren vacunar a los lechones en el momento del destete, alrededor de las 3-6 semanas de edad, ya que se les maneja individualmente con regularidad.
Cuando se destetan cerdos a edades más avanzadas, puede ser necesario vacunar antes del destete para garantizar una cobertura suficiente de prevención de enfermedades. Esto también puede depender de la situación sanitaria de la explotación.
Las vacunas combinadas son una buena opción, en particular para los cerdos de concurso, ya que eliminan la necesidad de múltiples inyecciones, reducen el estrés y la posibilidad de que se produzcan reacciones inflamatorias o lesiones en el lugar de la inyección.
REACCIONES ADVERSAS
Ocasionalmente, el porcino puede sufrir reacciones adversas a la vacuna administrada. Las potenciales complicaciones incluyen:
RIESGOS PARA EL PERSONAL
Además de las reacciones en los animales, el personal encargado de la vacunación debe ser especialmente consciente del peligro real de pincharse con una aguja (INSST).
Las agujas suelen utilizarse varias veces y pueden contaminarse con organismos cutáneos o fecales que provocan una infección si se inyectan accidentalmente en un ser humano. Algunas vacunas (por ejemplo, una vacuna viva contra el Mal Rojo) podrían causar una infección local si se inyectan accidentalmente en un ser humano (Fuente: UMASH).
Algunas vacunas se fabrican con agentes diseñados para mejorar la respuesta inmunitaria, llamados adyuvantes. Las vacunas que contienen adyuvantes, normalmente conocidas como “vacunas inactivadas”, son muy irritantes y pueden causar inflamación cuando se inyectan accidentalmente en el ser humano.
Las trabajadoras también deben tener especial cuidado debido a que la naturaleza de algunos de los tratamientos administrados afecta a los ciclos menstruales, a los aspectos reproductivos y a la gestación (Fuente: porkgateway.org).
En caso de que se produzca algún incidente, debe buscarse atención médica urgente y debe llevarse la hoja de datos (SPC) del producto.
ROTURA DE AGUJAS
Otro problema grave para la seguridad alimentaria de los consumidores y el bienestar de los animales es la rotura de agujas, que luego permanecen en el animal.
Es la mayor causa de decomiso de canales y produce importantes pérdidas económicas. En las plantas de procesamiento, a menudo utilizan detectores de metales para proteger las líneas de producción y evitar cualquier riesgo de entrada en la cadena alimentaria.
Los casos de rotura de agujas suelen comenzar con una aguja doblada que se endereza o pasa desapercibida, lo que termina en rotura. Esto puede evitarse con inyectores que incorporan protectores de agujas que revelan rápidamente tal incidencia. También protegen al usuario de las lesiones por pinchazo de aguja.
INYECTOR SIMCRO™ VS
El inyector Simcro™️ VS ha sido diseñado desde cero para el cumplir con la máxima seguridad.
El inyector VS puede adaptarse a los protocolos de tratamiento de la explotación con volúmenes de dosis fijos y precisos, identificándose con anillos de diferentes colores según dosis o medicamentos concretos.
El protector de la aguja intercambiable minimiza las lesiones por inyecciones accidentales para la seguridad del operador y reduce la posibilidad de rotura de la aguja.
El inyector VS incorpora un sistema opcional de marcado con sello de tinta intercambiable, especialmente desarrollado, que permite identificar visiblemente con diferentes colores a los animales tratados con un solo gesto del operario y, a los gestores, maximizar el bienestar de los animales y la eficacia del tratamiento, al comprobar la ubicación de la inyección administrada.
VS inyector también ha sido diseñado ergonómicamente para ser un dispositivo equilibrado y eficiente que puede ser utilizado con comodidad durante largos períodos de tiempo.
Dado que la bioseguridad es primordial, VS inyector puede hervirse o desinfectarse para cumplir con los más altos estándares de bioseguridad en la explotación.
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