Para leer más contenidos de porciNews Marzo 2022
El uso generalizado de la técnica de inseminación postcervical en los últimos años ha supuesto un ahorro sustancial en tiempo y dinero en la producción porcina. Sin embargo, el hecho de inseminar a decenas de cerdas con un único eyaculado aumenta el impacto productivo y económico que puede tener la introducción del virus PRRS (VPRRS) en un centro de inseminación artificial (CIA). |
Existen diversas publicaciones científicas que hacen referencia a la diseminación del VPRRS a través del suministro de dosis seminales infectadas.
Una de las primeras publicaciones fue en Dinamarca en 1996 con la introducción en granjas libres de PRRS de un virus con un 99% de similitud con una vacuna utilizada en el CIA desde meses atrás (Botner et al. ,1997).
En los últimos años, se han publicado de forma detallada casos clínicos reales de infección en CIAs y su repercusión en las granjas donde se había suministrado semen.
Los casos más conocidos son el de un CIA danés en 2019 (Larsen et. al, 2020; Christensen et al., 2020) o el plan de despoblación y erradicación que elaboró Suiza ante la entrada de semen infectado con VPRRS producido en un CIA de Alemania (Nathues et al., 2018). |
Ya desde los primeros años de investigación, se determinó que el VPRRS se excretaba en semen y podía infectar a cerdas por vía venérea (Prieto et al., 1997).
ALGUNAS PARTICULARIDADES SOBRE LA DETECCIÓN DEL VPRRS EN SEMEN
EXCRECIÓN
Existen factores intrínsecos inherentes a cada verraco, lo que hace que