Con una década de cerda hiperprolífica en el sector, es curioso que sigamos gastando tinta en innumerables artículos sobre el manejo de este tipo de cerda como si fuera una novedad.
Hay detalles que no acabamos de controlar. |
Si algo nos ha proporcionado la experiencia de los últimos años son una serie de certezas en las que casi todos los técnicos nos pondríamos de acuerdo:
Está claro que, genéticamente, la cerda ha dado un salto cualitativo impresionante.
En cuanto al manejo, aún hay muchas granjas donde se puede mejorar.
La capacitación y formación del personal debe ser un pilar en nuestras empresas y se debe insistir en ello, no solo para nuevas incorporaciones, sino para todos los empleados.
Aun así, en algunas explotaciones la producción de leche de las cerdas sigue siendo el talón de Aquiles. ¿Es todo responsabilidad de la alimentación? ¿Qué indican los últimos estudios? |
FACTORES NO NUTRICIONALES ASOCIADOS A LA PRODUCCIÓN DE LECHE
La producción de leche de las cerdas ha aumentado significativamente en los últimos años. A este respecto,
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TAMAÑO DE LA CAMADA (Nº de lechones)
Existe una fuerte relación lineal positiva entre la producción de leche y el tamaño de la camada.
A pesar de que la ingesta de leche por parte de los lechones disminuye individualmente a medida que aumenta el tamaño de la camada, el hecho de incrementar el número de glándulas funcionales con el aumento del tamaño de la camada compensa con creces cualquier disminución en la producción de leche de las glándulas individuales.
Los lechones beben leche, aproximadamente, 30 veces/día y, dentro de los 35 minutos posteriores a cada bajada de leche, la ubre estará llena en un 80% para la siguiente bajada. Sin embargo, si un alvéolo no se ha vaciado cuando baja la leche, no habrá espacio para leche adicional. Esto significa que la cerda no podrá producir leche para ese alvéolo.
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CALIDAD DE LA CAMADA
Relacionado con el punto anterior, en un reciente estudio se observó que, durante la primera semana de vida, las camadas de mayor peso lactaban una media de 31 minutos/día más que las camadas de menor peso.
A partir de la segunda semana de vida, no se observaron diferencias en la frecuencia y tiempo de amamantamiento entre camadas de alto y bajo peso, deduciéndose que los lechones de menor peso que sobrevivían a la primera semana eran capaces de estimular la glándula mamaria adecuadamente.
PARTIR CAMADAS
Las primeras 12-24h postparto son vitales para el desempeño inmunológico de los lechones, ya que es el intervalo durante el cual hay calostro disponible y su intestino es capaz de aprovecharlo.
En camadas de muchos lechones, especialmente en las que son poco homogéneas, es frecuente encerrar temporalmente a los lechones más pesados para dar una oportunidad a los más pequeños y débiles.
Por ello, es importante que, al partir camadas, se tengan en cuenta un par de reglas básicas:
En algunas granjas con altos índices de aplastamiento, se encierra a los lechones mientras las cerdas comen.
Este puede ser un buen procedimiento, siempre y cuando nos aseguremos de liberar a los lechones lo antes posible para que tengan acceso a las ubres.
ADOPCIONES E IGUALACIONES
Cuando los lechones son trasladados a otra camada necesitan encontrar su pezón en una nueva ubre, lo que les puede llevar un tiempo y, nuevamente, conducir a que las glándulas no se vacíen.
PARIDAD
Por norma general, las cerdas primerizas producen menos leche que las cerdas multíparas.
El consumo de pienso por parte de las cerdas lactantes experimenta un aumento desde el primer al sexto parto, siendo este aumento más notable entre el primer y el segundo parto ( 15-20%).
La ingesta de pienso por parte de la cerda durante la lactación, a menudo, no es suficiente para satisfacer sus necesidades de energía y nutrientes para el mantenimiento y la producción de leche, especialmente para las cerdas de primer y segundo parto.
Estas cerdas movilizan sus propios tejidos corporales para satisfacer sus necesidades de energía y nutrientes.
Además, las cerdas de primer parto todavía están creciendo y, por tanto, suelen tener reservas corporales inferiores de grasas, proteínas y minerales. |
Por otra parte, limitar el tamaño de la camada en las cerdas de primer parto para evitar grandes pérdidas de condición corporal puede parecer una buena idea, pero recordemos el efecto que tiene el vaciado de las glándulas mamarias.
FACTORES AMBIENTALES
Factores como el estrés, la temperatura ambiental y el fotoperiodo también pueden afectar la producción de leche en cerdas bien alimentadas. El mecanismo mediante el cual estos factores influyen en la producción de leche, a menudo, puede estar relacionado con la:
El control de la secreción de leche durante la lactancia parece depender de un inhibidor químico localmente activo en la leche que reduce la secreción por retroalimentación negativa.
Las estrategias para reducir el intervalo de lactancia y garantizar la extracción completa durante la eyección de la leche deben explorarse más a fondo.
ESTRÉS El estrés inhibe la bajada de leche en todos los mamíferos, siendo una respuesta natural muy primitiva que prepara al animal para huir en caso de peligro. Esto resulta especialmente importante durante la primera semana postparto, siendo importante recordar que las cerdas jóvenes suelen ser más sensibles. |
TEMPERATURA
Una temperatura elevada en la sala de parto deprimirá el apetito de las cerdas lactantes.
Las cerdas más jóvenes de primer y segundo parto, que tienden a comer menos, y las cerdas extremadamente grandes o con sobrepeso tienden a verse más afectadas negativamente por las altas temperaturas.
La temperatura no solo es importante por su impacto en el apetito de las cerdas, sino porque afecta directamente a la producción de leche.
La glándula mamaria se caracteriza por estar muy vascularizada, siendo las mamas más craneales las más buscadas por los lechones por tener más vascularización y producir más leche.
Es importante recordar que las necesidades térmicas de madres y lechones son muy diferentes, por lo que es importante conseguir dos climas en una misma sala.
Mientras que las madres están cómodas a 20°C, los lechones recién nacidos necesitan temperaturas cálidas (32-36°C). |
FOTOPERÍODO Como es natural, en vacas lecheras se han hecho varios estudios para comprobar cómo afecta el fotoperiodo y la intensidad de la luz a la cantidad y composición de la leche. En un estudio muy reciente, se observó que: Los resultados sugirieron a los investigadores que la diferencia de fotoperiodo e intensidad de luz podría actuar como una estimulación externa al patrón rítmico (metabolitos) involucrado en la alteración de la función hormonal, la producción de leche y su composición. |
Los pocos estudios que se han realizado han concluido que:
1. Exponer a las cerdas a 16 horas de luz/día en la sala de parto, en comparación con 8 horas o menos, aumenta el consumo de pienso por parte de las cerdas y el peso al destete de la camada, al tiempo que mejora su rendimiento reproductivo en los siguientes ciclos.
2. Las camadas de lechones expuestos a 16h de luz lactan mayor número de veces al día en comparación con aquellas expuestas a tan solo 8h.
En la segunda parte de este artículo hablaremos sobre aspectos relacionados específicamente con la dieta que afectan a la producción láctea de las cerdas. |
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