Gestión de purines: el estiércol es utilizado como abono orgánico para mejorar la calidad del suelo y de las aguas subterráneas
El sector ganadero trata de dar valor a la bioeconomía circular, que trata de reutilizar aquellos recursos biológicos renovables. Estos recursos son posteriormente utilizados como alimentos, compuestos químicos, materiales… Por lo tanto, los ganaderos hacen el esfuerzo para que la sociedad entienda la importancia de las deyecciones ganaderas como fertilizante orgánico.
La UE apuesta por un modelo que priorice utilizar las deyecciones no sólo en el campo. Asimismo extrayendo productos o analizando qué otras utilidades se le puede dar en otros ámbitos. Pese a que acostumbran a tener un imagen negativa, las deyecciones ganaderas son un gran recurso ganadero por sus nutrientes y materia orgánica que aportan.
Las deyecciones ganaderas son un gran recurso ganadero por sus nutrientes y materia orgánica que aportan.
Uno de los principales problemas de las deyecciones es la contaminación de acuíferos
Por ello, es importante la gestión correcta del estiércol, para cuidar las aguas subterráneas. La voluntad de los ganaderos y payeses es no contaminar los acuíferos. Recalcan la importancia de la economía circular.
Desde el año 2013 se han aplicado varias medidas para mejorar la imagen de las deyecciones y conseguir que sean bien vistas como recurso. Estas medidas implican acciones como:
Progresar en la gestión de los purines y del estiércol es la clave del sector agrícola y ganadero. La ganadería proporciona a la agricultura el abono con el que se produce los alimentos que posteriormente el sector ganadero consume en forma de pienso para los animales.
En conclusión los expertos coinciden en que hace falta investigar más sobre el tema para mejorar el asesoramiento.