Entre 2019 y 2023, los casos reportados de enfermedades zoonóticas, en este caso de listeriosis en humanos ascendieron a 2.952, evidenciando un incremento constante que alcanzó su punto más alto desde 2007. Este aumento podría estar vinculado al envejecimiento de la población europea, donde el 21,3 % de los habitantes supera los 65 años. Este factor, junto con la mayor incidencia de enfermedades crónicas asociadas a la edad, eleva el riesgo de desarrollar síntomas graves en los grupos más longevos. Los alimentos listos para consumir, como el salmón ahumado en frío, productos cárnicos y lácteos, representan las principales fuentes de infección.
Según los datos más recientes de la EFSA, la proporción de muestras en estas categorías de alimentos que exceden los límites de seguridad establecidos para la contaminación con Listeria monocytogenes oscila entre el 0,11 % y el 0,78 %, siendo las salchichas fermentadas las que registraron el nivel más alto. Asimismo, en la Unión Europea, las zoonosis más reportadas en humanos fueron la campilobacteriosis y la salmonelosis. Durante 2023, se registraron 148.181 casos de campilobacteriosis, superando los 139.225 reportados en 2022.
Por su parte, la salmonelosis se ubicó como la segunda infección gastrointestinal más frecuente en humanos, con 77.486 casos notificados, frente a los 65.478 registrados el año anterior. Solo quince Estados miembros, junto con Irlanda del Norte (Reino Unido), lograron cumplir plenamente los objetivos establecidos para reducir la presencia de salmonella en aves de corral. Esto refleja un retroceso respecto a 2022, cuando diecinueve Estados miembros alcanzaron dichos objetivos.
El informe también examina los brotes de enfermedades de transmisión alimentaria en la Unión Europea, definidos como incidentes en los que al menos dos personas desarrollan la misma enfermedad tras consumir alimentos contaminados. En 2023, se registraron 5.691 brotes de este tipo, lo que representa una leve disminución respecto al año anterior. No obstante, el número de casos, hospitalizaciones y fallecimientos aumentó, alcanzándose la cifra más alta de víctimas mortales en los últimos diez años.