Un reciente estudio explora el impacto de la suplementación con genistina, un isoflavonoide de soja con actividad estrogénica, en el rendimiento reproductivo, la inmunidad y la capacidad antioxidante de cerdas gestantes.
El estudio destaca el potencial de la genistina para mejorar aspectos clave de la reproducción en cerdas, lo que podría tener implicaciones significativas para la producción porcina.
El experimento se llevó a cabo con un grupo de 72 cerdas (cruce Landrace × Yorkshire), distribuidas en dos grupos de 36, en función de su espesor de grasa dorsal (EGD) y número de partos:
Los resultados revelaron que la suplementación con genistina aumentó significativamente el número promedio de lechones vivos por camada y tendió a incrementar la cantidad de lechones sanos (P = 0.058). Asimismo, se redujeron los nacimientos de lechones momificados y las muertes perinatales (P < 0.05), aunque el peso promedio de los lechones vivos fue inferior en el grupo suplementado.
En términos de inmunidad y capacidad antioxidante, la genistina mostró efectos positivos notables. Estos incrementos sugieren una mejora en la respuesta inmunitaria, crucial para la salud de las cerdas y sus camadas. Además, la genistina mostró una tendencia a reducir los niveles de colesterol total y colesterol de lipoproteínas de baja densidad (LDL-C) hacia el día 85 de gestación. |
Este estudio también reveló cambios en la expresión génica placentaria asociados con la suplementación de genistina.
En particular, se observó un aumento en los niveles de factores clave como el factor de crecimiento similar a la insulina I (IGF-I) y transportadores de aminoácidos como SNTA2 y SNAT4, mientras que disminuyó la abundancia de genes relacionados con la inflamación, como la interleucina-1β (IL-1β).
Estos hallazgos sugieren que la genistina no solo mejora la calidad de la camada, sino que también optimiza el entorno placentario para un desarrollo fetal saludable. |