El sector porcino español continúa ganando presencia en los mercados internacionales, apoyado especialmente en el impulso de comunidades como Aragón, Cataluña y Murcia. Estas regiones destacan no solo por el volumen de su producción, sino también por contar con estructuras empresariales consolidadas, profesionales altamente cualificados y granjas modernizadas, lo que les permite mantener altos estándares de eficiencia.
En el marco del Foro Porcino de Aragón, celebrado el pasado martes en Zaragoza bajo el lema “Transformar el presente para liderar el futuro”, el director general de Interporc, Alberto Herranz, compartió una visión optimista pero realista sobre el momento que atraviesa el sector. Subrayó que, en medio de tensiones geopolíticas y un escenario incierto a nivel mundial, es fundamental reforzar la imagen del porcino español y continuar apostando por la internacionalización.
Actualmente, el 50 % de la producción nacional se destina a la exportación, una cifra que no sería posible sin el papel estratégico de algunas regiones. En este sentido, Aragón ha reforzado su posición como eje exportador, y según los datos más recientes, solo en 2024 produjo un millón de toneladas de carne de cerdo, de las cuales más de 800.000 se vendieron fuera del país, representando casi un tercio del total nacional.
Herranz también puso el foco en Asia, especialmente en China, donde España se mantiene como primer proveedor de carne porcina, por delante de grandes productores como EE. UU., Canadá o Dinamarca. En el primer trimestre de 2025, las exportaciones al gigante asiático han crecido un 8 %, lo que confirma la solidez de las relaciones comerciales con ese mercado y abre la puerta a nuevas oportunidades.
Desde otra perspectiva, Manuel García, presidente de Interporc y de Anprogapor, abordó las dificultades a las que se enfrenta la industria, como el aumento de los costes de producción por el encarecimiento de las materias primas. Sin embargo, valoró la capacidad del sector para mantenerse competitivo tanto fuera como dentro de la Unión Europea, donde España ya es proveedor principal.
En su intervención, García destacó especialmente el papel de Aragón en esta evolución. “Es una comunidad esencial para el crecimiento del porcino español, tanto por volumen de producción como por el compromiso del sector en esta tierra”, afirmó.