La Peste Porcina Africana (PPA) se introdujo en Rusia desde la región del Cáucaso en el año 2007, instaurándose inicialmente en el sur del país y diseminándose posteriormente en dirección norte a partir de mayo del 2011.
Durante los años 2019 y 2020 y desde comienzos de 2021 ha continuado la misma tendencia que en años anteriores, con un acusado aumento de casos en verano, confirmándose por primera vez a finales de julio de 2019 la presencia de la enfermedad en Eslovaquia y en Serbia, mientras que en 2020 se detectó por primera vez en Grecia en cerdo doméstico en febrero y en Alemania en jabalí en el mes de septiembre.
En los siguientes mapas se muestra la distribución espacial de los focos de PPA comunicados a través de ADNS durante el año 2020 y desde comienzos de 2021, respectivamente.
- Picos estacionales obvios en verano.
- La mayoría de todos los casos se producen en explotaciones con menos de 10 cerdos.
- La mayoría de los casos se han producido por causas ambientales, debido a la contaminación por jabalíes.
- Ocurrencia ocasional en granjas comerciales, por lo que la bioseguridad debe garantizarse en todo momento.
En el caso de los jabalíes los mayores problemas son:
- Persistencia incluso con bajas densidades de jabalíes.
- Altas densidades de población de jabalíes en ciertas áreas / resistencia ambiental al virus de la PPA.
- Saltos del virus por medios humanos. • Propagación natural lenta pero evidente (entre 2,9 a 11,7 km/año es la velocidad media de propagación).
- Mayor probabilidad de ocurrencia y propagación / repetición de ciclos.
En el siguiente gráfico se puede observar la evolución temporal desde el año 2014 en el número de focos notificados a través de ADNS por los países afectados en cerdo doméstico y en jabalí:
Fuente: MAPA