El uso de la saliva como muestra biológica tiene muchas ventajas, principalmente relacionadas con su obtención, ya que es un procedimiento no invasivo, simple y que no genera dolor.
Además, se pueden obtener muestras repetidas en cualquier momento y lugar, sin necesidad de personal especializado. Por lo tanto, es muy adecuada para fines de monitorización y tiene muchas aplicaciones potenciales, tanto en medicina veterinaria como humana.
Estas ventajas son especialmente relevantes en cerdos, donde la extracción de sangre es muy estresante, tanto para el animal como para el personal encargado de la toma de muestras.
El uso de saliva en la especie porcina puede ser muy apropiado, pudiendo el personal tomar muestras fácilmente, lo que permite realizar análisis más frecuentes y controlar mejor la salud y el bienestar animal (Imagen 1).
En una revisión sobre la utilización de la saliva para la detección de patógenos en cerdos se señaló la posibilidad de detectar más de 23 patógenos virales, siendo la detección de enfermedades infecciosas el principal uso de la saliva en la práctica rutinaria en esta especie.
Sin embargo, la saliva también puede ser utilizada para evaluar otros aspectos relacionados con la salud y el bienestar animal, como:
Nivel de estrés
Respuesta inflamatoria
Respuesta inmunitaria
Equilibrio redox
En este artículo se repasan los principales biomarcadores empleados para evaluar el nivel de estrés en cerdos.
Además, se incluyen algunos consejos generales relativos a la toma de muestras y el almacenamiento de la saliva.
BIOMARCADORES DE ESTRÉS
Cortisol
Alfa-amilasa salival (sAA)
Cromogranina-A (CgA)
Esterasa total (TEA) y sus componentes
Oxitocina (OT)
Cortisol
Actualmente, el cortisol sigue siendo el biomarcador más utilizado para detectar [registrados]el estrés en cerdos. Cuando se produce una situación de estrés, se activa el eje hipotalámico-pituitario-adrenal (HPA) que desencadena la liberación de cortisol a la circulación sanguínea (Figura 1).
En la sangre, el cortisol está presente en dos fracciones, unido a proteínas y libre. En cambio, en la saliva solo hay cortisol libre, que es la fracción activa.
El paso del cortisol libre desde la sangre hacia la saliva se produce por difusión pasiva de la molécula a la glándula salival.
Debe tenerse en cuenta que existe variabilidad en los rangos de referencia reportados en la literatura para este metabolito en animales no estresados y una alta variación intraindividua...