Se recomienda que los cerdos permanezcan sin alimento como parte de la preparación en la granja antes del transporte. Esta práctica da como resultado menos mortalidad, especialmente en condiciones de clima cálido y en cerdos susceptibles al estrés.
El ayuno también reduce el mareo durante el viaje, como lo demuestra la disminución de los niveles circulantes de vasopresina durante el transporte en comparación con los cerdos que no ayunaron.
La muerte de los cerdos que no han ayunado durante el transporte puede resultar de la presión del estómago lleno sobre la vena cava, lo que resulta en una disminución de la eficiencia del flujo sanguíneo.
Sin embargo, también se informó que los grupos de cerdos en ayunas 18 h antes de la carga pueden ser más difíciles de manejar durante la carga, como lo demuestra la mayor proporción de cerdos que retroceden, hacen giros de 180° y vocalizan. Estos comportamientos son un posible reflejo del aumento de la frustración, la fatiga y la excitación causada por el hambre.