Los lechones se revalorizan en Alemania y se deprecian en España
Bajó el peso medio, en el muestreo de Mercolleida, 365 gramos en canal en la semana del 9 de septiembre, y la cotización se ha quedado, tras los vaivenes de una larga negociación, en el mismo sitio. Inusual repetición en el ecuador de septiembre, forzada por las altas temperaturas que han frenado los crecimientos en España […]
Bajó el peso medio, en el muestreo de Mercolleida, 365 gramos en canal en la semana del 9 de septiembre, y la cotización se ha quedado, tras los vaivenes de una larga negociación, en el mismo sitio. Inusual repetición en el ecuador de septiembre, forzada por las altas temperaturas que han frenado los crecimientos en España y por el final de las vacaciones que permite nuevos impulsos en la carne europea y que suba así el cerdo en el norte de la UE.
Así, los datos más relevantes han sido este descenso del peso en España y la renovada firmeza del precio en Alemania. La ola de calor de estos últimos días es la causa de esta inversión de la tendencia, que será puntual pero que no por eso deja de ser.
Lo mismo sucede en Francia, con temperaturas altas también incluso en el norte del país que mantienen los pesos medios en su banda baja del año, a nivel de agosto. Tan solo en Alemania los pesos remontan desde mediados de agosto y vuelven a su nivel pre‐ veraniego de mayo. Pero la demanda de cerdos es sostenida en Alemania, sobre todo porque su oferta nacional es inferior al año pasado y necesita más cerdos (que importa de Holanda, Bélgica, Dinamarca) para sostener su exportación y, al mismo tiempo, atender a una demanda interior que da señales de recuperarse ahora.
Alemania consigue mantener su volumen de matanza de 2016 en un nivel similar al de 2015, pero es a costa de comprar cerdos y lechones fuera, lo que “choca” con su creciente proteccionismo interior, que privilegia la carne de cerdos nacidos y criados en Alemania y da oxígeno a los cerdos alemanes. Y por eso también el lechón está revalorizado en Alemania y depreciado en España.
Más exagerada es todavía la situación en Francia, donde el cerdo no ha dejado de subir, poco a poco, ninguna semana (+1,6 céntimos en ésta), ya que ha conseguido crear un circuito comercial que se autoabastece de producción nacional y que permite defender precios más altos para la carne de cerdos nacidos y criados en Francia…, precios que no alcanza la importación.
Al final, la oferta de cerdos en Francia también está siendo similar este año al pasado, al menos de momento, ya que se prevé que pueda ser inferior en el tramo final de año (mayor matanza de cerdas al final del pasado y principios del actual).
Mientras, en España la matanza del primer semestre ha subido en torno al +6% respecto a 2015 y en Dinamarca ha bajado alrededor de un ‐5%, con descensos también en el este de Europa. Con lo que el resumen de la oferta europea muestra una España al alza y el resto de países que se mueven, como máximo, en la estabilidad y, como tendencia general, a la baja.
El primer productor de cerdos, España, va a tener más, pero el segundo, Alemania, que es al mismo tiempo el mayor productor y exportador de carne de cerdo de la UE, va a tener menos y va a seguir buscándolos en sus países vecinos. Lo que tenga de más España, lo tendrá de menos el resto de la UE.
Con la bajada de las temperaturas volverá la presión al mercado español, pero en el norte de la UE el consumo se está recuperando y este céntimo subido por el cerdo alemán debe servir también para detener el lento gota a gota bajista que registra la carne (suben algunas piezas, como paletas y pancetas, pero se estanca el resto del despiece, sobre todo los jamones).